Lo que en verdad nos da satisfacción
El ser humano necesita una identidad e identificaciones. Necesitamos una “base” sobre la cual ir creando la personalidad. Esa información la vamos recogiendo y la van programando desde que somos pequeños. Ser de X nacionalidad, tomar las costumbres del país donde nacimos, todo lo que nos dicen que una niña o niño debe o no hacer, las historias de la familia, los “tú eres tan…” que nos repiten mamá y papá… todo eso va creando el programa con el cual operamos por años, hasta que despertamos y nos damos cuenta cuánto nos limitan.
Y sí, unos datos del programa los superamos sin darle mucha vuelta cuando nuestra perspectiva va cambiando, pero otros aspectos realmente nos limitan y de verdad nos cuesta superarlos, porque sentimos que nos definen y nos da miedo preguntarnos quién somos sin eso.
Bueno, astrológicamente hablando este es el momento no solo para preguntarte y responderte si hay vida más allá de tus identificaciones, sino también para atreverte a superarlas y reinventarte.
Lo que de verdad nos da satisfacción en esta vida es El Progreso y, para poder lograrlo, hay que tener valentía para dejar el YO que ya nos quedó pequeño.