Es curioso como todos dicen que quieren cambios, pero no les gustan las sorpresas o al menos las sorpresas que no pueden controlar, cuando el cambio suele traer cosas nuevas de las cuales no tenemos referencia y el encuentro con ellas tiene elementos de sorpresa.
Es justo la “sorpresa” lo que nos pone en modo de estudiantes, curiosos, abiertos y humildes. con el ego de creer saberlo todo solo nos estamos perdiendo de casi todo y limitamos el crecimiento de nuestra vida, la riqueza que podrían tener nuestras experiencias. De nuevo, le damos mucha fuerza a las ganas de control que nos mantienen en la zona cómoda y al mismo tiempo nos desconecta de nuestra voz interior, poder y certeza de ser capaces de reinventarnos.
Como esto no es lo que hemos venido a hacer, la vida, la luz, el universo nos sorprende. ¿Te has dado cuenta que la vida tiene maneras de alertarnos antes de que suceda un cambio grande invitándote a que seas parte, a que participes en vez de resistirte? Así como cuando pierdes las llaves de tu casa unos meses antes de saber que tienes que mudarte o cuando te despiden de tu trabajo cuando ya tenias ganas de irte pero no te atrevías.. ¡pasa! Milagros y señales hay, lo que no abunda es la atención sino el temor y las ganas de control.
Una vez conscientes no podemos se indiferentes, los cambios son la única constante y trabajar con ellos es lo que nos hace descubrirnos, así que ¿para que resistirlos? Suelta la ilusión de control y deja que se te muestre lo que inconscientemente estabas deseando. Lo nuevo es la alternativa de cambio que estabas esperando.