¿Qué es un karma-mate?
Para comenzar, lo que debes saber sobre los karma-mates es que cuando llegan a nuestra vida es como tener una relación con el espejo a quien le debemos o nos debe algo. La mayoría de las relaciones serias que tenemos que no llevan a trabajar internamente por un período prolongado de tiempo lo son. La meta es aceptar lo negado en nosotr@s, a veces lo escondido y en potencia, integrarlo, sanar y allí puedes soltar.
Much@s karma-mates se quedan junt@s toda la vida, sobre todo cuando no es una sino varias lecciones por aprender. La identificación no es tan rápida pero la sensación de falta cuando esa persona no está es muy fuerte pues nos ayuda con su presencia, retos y ejemplos a reconocernos e integrarnos.
¿Recuerdas esa relación en la que duraste años dándole al mismo asunto? Quizá aún estás en esa relación. Much@s nos casamos con esa relación. Esta es una relación más intensa que la del ego-mate, la manifestamos para aprender y superar lo que hace falta para evolucionar.
Un karma-mate no es malo, ni es una relación negativa a menos..
- Que ya aprendiste lo que tenías que aprender, no hay más que aprender y no quieras soltar.
- Que tú aprendiste lo que tenías que aprender, el o ella no quieren evolucionar, te tienes que mover y te da miedo empezar de nuevo, hacer tu camino, tienes apegos. Estar allí hace daño
- Que creas que es tu trabajo enseñarle a él/ella en su proceso.
Una relación con un karma-mate es buena cuando:
- Estamos amb@s en constante evolución enseñándonos.
- Reconozco que lo que veo en el/ella es parte de mí. No lo juzgo, trato de no proyectar más, sino de hacerme cargo de mi parte del camino.
- Amb@s tenemos ganas y voluntad de mejorar.
- La comunicación sobre nuestro aprendizaje juntos es constante.
- Me acompaña en mi proceso en vez de que pase algo, por ejemplo: se fue con otr@ y yo l@ busco para continuar el mismo.
Y con ese ejemplo: “se va con otr@” primero considera si es un ego-mate. Una relación que empezaste por ego, porque si tu no le harías eso, evidentemente no están en el mismo nivel de consciencia. Si tienes certeza de que es un karma-mate y este tipo de situación es parte, cuestionarte cómo tú te has sido infiel, y recuerda que para vivir tu proceso de aprendizaje no es necesario quemarte.
No uses esta información para decir: “Juan es mi karma-mate y por eso debo aguantar, porque el dolor me hace crecer”
Recuerda que si es un buen karma-mate, te acompaña en el proceso. Es la pareja que te cacha y te dice: “esto te hace mal, pero acá estoy y te voy a ayudar”; y aunque la relación no es perfecta porque somos humanos, vamos de la mano.
