Existe el sano egoísmo: concentrarte en mejorar tus fallas en vez de afanarte, reclamar y tratar de mejorar las de alguien más. En resumen: es “tenerte para poder darte”.
Míralo desde esta perspectiva: ¿qué tal el sano egoísmo que me hace enfocarme en mejorar mis fallas, en asumir responsabilidad por lo que quiero ver manifestado en la realidad, en vez de “compartirle” ese peso a otro, o creyendo que es su trabajo hacerme feliz? ¿Qué tal trabajar mi parte del camino en vez de afanarme en que el otro mejore para que mi vida sea más fácil? ¿Qué tal cuidar de mí, de estar bien, de crecer en vez de quejarme de todo lo que el otro “debería” hacer?
Esto de “tenerte para poder darte” también puede ser visto como “tenerte, elevarte y dar ejemplo”, una de las mejores maneras de compartir y ser generoso, es a través de quién eres y no solo de lo que haces.
En este video, te cuento sobre la diferencia entre sano egoísmo, el egoísmo negativo y el rol que juegan las expectativas:
https://www.facebook.com/miastral/videos/sano-egoismo-ego%C3%ADsmo-negativo-y-las-expectativas/1114951925219749/
Acá te cuento más sobre cómo cultivar el ego positivo:
Originalmente publicado en abril de 2019.