Leer eso con pausa y profundidad puede llevarnos a entender que así como somos un cúmulo de contrariedades, estas pueden trabajar juntas. ¿Cómo es el orden y la disciplina de atender lo que nos debemos darnos la completa libertad?
Si te sientes emocionalmente madur@ sabes que ser libre no es hacer lo que quieres, cuando quieres, con quien quieres y tantas veces como quieres. Eso solo provocará anarquía y caos. La libertad es estar en paz, sentir que al haberte cumplido lo que te debes para crecer como persona y evolucionar, duermes en paz por la noche y amaneces ligero para reinventarte y continuar en expansión.
Es así, con el trabajo interno que podemos encontrarnos como punto común en medio de dos ideas y energías que parecen contradictorias y una vez que organizas tus prioridades, analizas tu visión y creas una estrategia te darás cuenta que todo tiene su tiempo y que la meta última es paz y auténtica libertad.
Todo lo que deseas en su máxima expresión es alcanzado con disciplina y estructura, incluso la manifestación de ideas innovadoras, procesos de inspiración, sanación y hasta los compromisos de amor.